Durante los últimos años, los dispositivos móviles se han convertido en elementos de renovación acelerada, con modelos que se cambian cada dos años o menos, impulsados por lanzamientos constantes. Esta dinámica ha despertado un debate clave sobre si realmente se trata de una evolución genuina de la tecnología o de una obsolescencia programada que acorta la vida útil de los equipos. Frente a este panorama, aparece una nueva alternativa: teléfonos diseñados para durar más tiempo sin sacrificar desempeño ni diseño.
El tema va más allá de lo tecnológico. Cambiar de celular cada poco tiempo no solo representa un gasto de dinero constante para los usuarios, también deja una huella en el medioambiente con la cantidad de equipos que terminan desechados. Por eso, cada vez más personas esperan que sus teléfonos duren más y continúen siendo rápidos y confiables sin obligarlos a reemplazarlos antes de tiempo.
vivo es consciente de esta problemática, por lo que este año ha traído al mercado un dispositivo que es resistente, cuenta con una batería potente e incluso está diseñado para durar: el V50 Lite, diseñado con el propósito de extender la vida útil de los smartphones, reducir la frecuencia de renovación, responder a una necesidad creciente de consumo responsable y a un precio asequible.
Uno de los ejes más relevantes de este modelo es la durabilidad de la batería. Con tecnología BlueVolt de 6,500 mAh, este equipo resiste hasta cinco años de uso manteniendo más del 80% de su capacidad, un logro significativo frente al promedio de la industria. Además, el V50 Lite incorpora un sistema de carga ultrarrápida de 90W capaz de alcanzar el 50% en apenas 23 minutos, ofreciendo uno de los tiempos competitivos a la hora de realizar una recarga energética del mercado, e incluye la función de carga inversa, lo que permite utilizarlo como fuente de energía para otros dispositivos.
La propuesta de durabilidad va más allá del hardware. El V50 Lite ha sido sometido a pruebas rigurosas que validan su resistencia contra caídas, polvo y agua. Certificaciones internacionales como SGS 5-Star y grado militar garantizan su capacidad para soportar golpes, torsiones y accidentes cotidianos. Además, cuenta con protección IP65, lo que asegura que los usuarios puedan confiar en que estos teléfonos no se verán comprometidos por la lluvia, el polvo de un viaje o incluso escenarios extremos.
En términos de experiencia, la durabilidad no depende solo del hardware, sino también del soporte de software. Por esto, este modelo está respaldado por actualizaciones de Android y de seguridad que mantienen vigente al dispositivo durante varios años, garantizando acceso a nuevas funciones del ecosistema y reforzando la protección frente a riesgos digitales. Gracias a Funtouch OS15, que optimiza la fluidez del sistema con inteligencia artificial y gestión avanzada de recursos, los equipos logran una experiencia estable incluso tras un uso prolongado. Esta combinación de actualizaciones continuas y optimización del sistema convierte a la longevidad en un eje real de valor, ofreciendo a los usuarios la confianza de que sus teléfonos seguirán vigentes y seguros sin necesidad de reemplazarlos de manera prematura.
En cuanto a lo estético, el V50 Lite se distingue por su diseño ultradelgado de apenas 7.79 mm, un logro notable considerando su batería de gran capacidad. El acabado premium con patrón de diamante, los bordes reducidos y las opciones de color — como Dorado Titanio y Negro Místico — combinan elegancia con funcionalidad, y materiales reforzados para ofrecer un equipo estilizado y robusto a la vez.
La propuesta también considera el impacto ambiental. Reducir la necesidad de cambiar de teléfono con tanta frecuencia implica menos desechos electrónicos y un consumo más consciente de recursos. De hecho, en 2024 el Ministerio TIC reportó la gestión de más de 20.000 kilos de residuos electrónicos y reciclables, además de una reducción de 193 toneladas de CO₂ equivalente, cifras que reflejan la magnitud de lo que está en juego cuando se prolonga la vida útil de los dispositivos. En un contexto donde la sostenibilidad se ha convertido en un criterio clave de compra, esta apuesta por la longevidad se alinea con las expectativas de consumidores que buscan tecnología confiable, pero también responsable.