Hoy los estadios inteligentes integran tecnología que permite ofrecer a sus visitantes experiencias únicas y personalizadas como el WiFi Marketing.
El WiFi Marketing utiliza la conexión WiFi de un estadio restaurante, cafetería, bar, hotel, salón de belleza, clínica, gimnasio y otros lugares como herramienta para conectar con el público objetivo y potenciar los resultados de las marcas, ya que se encarga de enviar encuestas, anuncios o promociones a los dispositivos de los aficionados, lo que mejora la interacción y genera nuevas fuentes de ingresos.
“En el caso de un estadio, el WiFi Marketing transforma la infraestructura de red existente en una poderosa herramienta para conectar con los fans, generar experiencias únicas y monetizar una inversión tecnológica que normalmente queda subutilizada. ¿Cómo funciona? Cuando un fan se conecta a la red WiFi del estadio accede a un portal cautivo personalizado que no solo le ofrece acceso a internet, sino que también captura datos valiosos, desde información demográfica hasta preferencias y comportamientos, esto de manera segura y transparente”, explica Yassef Lotina, CEO de Datawifi.
El portal cautivo hace más que gestionar el acceso, se convierte en una capa de activación para vender espacio publicitario a patrocinadores; mapear el comportamiento de los aficionados con análisis de WiFi; ofrecer contenido dinámico mediante personalización con inteligencia artificial; apoyar las soluciones WiFi de eventos para los organizadores; fomentar las compras móviles y la interacción en la aplicación; y mejora la conectividad del estadio durante las horas punta.
No solo se trata de permitir que los aficionados naveguen por las redes sociales durante el medio tiempo de un partido o evento, sino que el WiFi Marketing obtiene información en tiempo real, facilita la segmentación de la audiencia e impulsa la monetización del estadio a gran escala.
En la Ciudad de México, el Estadio Alfredo Harp Helú de los Diablos Rojos es uno de los recintos que ha implementado la tecnología WiFi Marketing que le ha generado beneficios como el aumento en la interacción con los fans durante y después de los eventos, nuevas fuentes de ingresos a través de publicidad, servicios premium de conexión y un mayor conocimiento del perfil del público que asiste a cada espectáculo.
Otro ejemplo del impacto del WiFi Marketing en los estadios fue el Super Bowl 2024, en el que fluyeron más de 34.8 terabytes de datos, un incremento de 100 veces con respecto a 2014, además de que la demanda logró cubrirse a un costo menor que si se hubieran usado datos móviles.
“Es por ello que no es de extrañar que el WiFi se está convirtiendo rápidamente en el servicio más valioso para todo tipo de aficionados del deporte o fans de conciertos masivos”, destaca el CEO.
En un escenario en el que México se prepara rumbo al Mundial 2026, el WiFi Marketing en estadios representa un área de oportunidad para crear una fuente de monetización de datos porque los partidos de futbol atraen a millones de personas y los estadios son recintos clave, de ahí que es enorme la oportunidad de monetizar la conectividad de los aficionados, sin embargo, aún está desaprovechada, remarca Yassef Lotina.
“Hablemos del potencial. De cara al futuro, México albergará 13 partidos de la Copa Mundial de la FIFA 2026, con más de 860 mil aficionados en menos de un mes. Con estrategias de interacción con los aficionados (anuncios, encuestas, pantallas interactivas) estos eventos por sí solos podrían generar más de 5 millones en ingresos directos por WiFi Marketing y un millón de dólares anual en 5 sedes clave con activación constante. Estas cifras no incluyen ganancias indirectas por venta de mercancías, ROI de patrocinio digital o planificación más estratégica de personal y concesiones basadas en información en tiempo real”, agrega.
Asimismo, refiere que existen empresas especializadas en la monetización de redes WiFi públicas, las cuales están ayudando a los operadores de estadios a convertir el tráfico en información práctica e ingresos incrementales combinando tecnología, análisis y ciencias del comportamiento para impulsar decisiones más inteligentes.
“La tecnología de los estadios ya no se trata de innovación, sino de relevancia, sostenibilidad y competitividad en la economía global. Si México quiere ser más que una simple sede del Mundial, si aspira a definir la próxima generación de experiencias en vivo, entonces está obligado a empezar por una conectividad más inteligente”, concluye Lotina.