El comercio electrónico lleva años siendo la gran promesa del consumo moderno, creciendo a un ritmo cinco veces superior al de las transacciones en tiendas físicas. Sin embargo, paradójicamente, el momento crucial de la venta —el pago— suele representar el mayor punto de fricción. Esto se debe a formularios extensos, a la necesidad de crear nuevas cuentas o a la simple desconfianza en la seguridad del sitio web. El impacto es evidente, ya que se estima que alrededor del 70 % de los carritos de compras en línea fueron abandonados a nivel mundial durante 2024.
Las razones del abandono de los carritos son claras: renuencia a crear nuevas cuentas (26 %), falta de confianza en la seguridad del sitio web (25 %) y procesos de pago largos (22 %).
José Rabello, director de ventas para Banca y Servicios de Pago de Países Andinos y el Caribe de Thales, señala: “En un contexto donde el comercio electrónico crece a gran velocidad, pero el momento del pago sigue siendo el principal punto de fricción, es fundamental ofrecer soluciones que reduzcan la complejidad y devuelvan la confianza al consumidor. Click to Pay surge precisamente para cerrar esa brecha entre la expectativa de comodidad y la experiencia real de pago en línea”.
El camino hacia la simplicidad sin contacto
Click to Pay (CTP) surgió de la modalidad de Comercio Remoto Seguro (SRC) definida por EMVCo en 2017 y respaldada por las principales redes de pago. Su objetivo es transformar la experiencia de pago en línea, haciéndola tan fluida y segura como las transacciones sin contacto en el mundo físico.
Para el consumidor, la recompensa es inmediata ya que basta un clic para procesar el pago de forma segura. Los datos de pago se registran una sola vez con el emisor de la tarjeta, permitiendo que los comercios integrados reconozcan al cliente y que este pueda elegir entre las tarjetas almacenadas sin tener que ingresar manualmente los datos en cada compra.
Para los minoristas, la gran ventaja es la reducción de las tasas de abandono. En el segundo semestre, que históricamente concentra picos de consumo como Black Friday y la época navideña, garantizar un proceso de pago optimizado es fundamental para maximizar los ingresos. CTP se integra fácilmente en las páginas de pago existentes y ofrece una alternativa segura y eficaz a otros métodos de pago con un solo clic.
Seguridad invisible: el poder de la tokenización
La aparente simplicidad de Click to Pay se sustenta en una infraestructura de seguridad sólida. El sistema utiliza tokenización, que transforma los datos confidenciales de la tarjeta en un identificador digital, garantizando que ningún dígito quede expuesto durante la transacción. Esta seguridad avanzada restablece la confianza del consumidor, combatiendo una de las principales causas del abandono de los carritos de compra.
Para los emisores de tarjetas, adoptar Click to Pay representa una oportunidad estratégica. Además de aumentar las tasas de autorización y reducir el fraude, su implementación se está convirtiendo rápidamente en un requisito obligatorio para las redes de pago, con expectativas de inscripción global para 2025.
El próximo salto: la biometría y la experiencia mejorada
El futuro de Click to Pay apunta a la integración de tecnologías que certifiquen una experiencia aún más segura y sin contraseñas. Payment Passkeys, asociada al CTP, permite aprovechar la biometría para sustituir la introducción manual de contraseñas, siguiendo la tendencia de las grandes redes de pago hacia la tokenización y la simplificación del proceso de compra digital.

