La popularidad de los cigarrillos electrónicos, o vapeadores, ha ido en aumento en los últimos años a medida que la gente busca alternativas distintas y menos dañinas al tabaco tradicional.
Relx International, un pionero en ofrecer productos alternativos al tabaco cree que en Colombia existe una necesidad urgente de regular este mercado para ayudar a frenar el crecimiento de un mercado negro y garantizar que estos productos no se vendan a menores de edad.
Pero, ¿qué son exactamente los vaporizadores y por qué deben clasificarse de forma diferente al tabaco tradicional?
Todos los dispositivos de vapeo tienen tres componentes principales: la batería, el atomizador y el líquido. La batería sirve como fuente de energía para alimentar el atomizador, que calienta y convierte el líquido en vapor.
Existen diferentes categorías de dispositivos de vapeadores, en particular vapes desechables y recargables. En la mayoría de los casos, un vape desechable no necesita cargarse y viene con un líquido y una batería cargada. Los vapeadores desechables se diferencian de los vapes recargables en que no necesitan cargarse, rellenarse ni comprar nuevos tanques de líquido. Cuando la unidad desechable está vacía, se dispone en canecas especiales para baterías.
¿Cómo se regulan los vaporizadores en los distintos países?
La regulación de los vapeadores difiere según el país y la perspectiva de política pública en salud que tiene el gobierno de turno. Por ejemplo, en Argentina, Venezuela, Brasil y México están prohibidos. En Perú, Ecuador y Colombia se discute actualmente una regulación específica para la categoría, mientras que Chile acaba de aprobar una regulación dando a estos productos la misma categoría que los cigarrillos ante la ley. En el Reino Unido ya se recomienda médicamente el uso de vaporizadores para aquellas personas que desean dejar de usar cigarrillo tradicional.
Dicho esto, la mayoría de los países del mundo han encontrado un punto medio donde se regula la industria sin asimilarla al tabaco tradicional y al mismo tiempo se protege a los menores de edad y adolescentes. Esta opción permite a los gobiernos gravarlos tributariamente y en consecuencia beneficiarse de los ingresos fiscales.
Tamaño del mercado de vape en Colombia
Dado que el mercado del vapeo aún no está regulado en el país, es difícil cuantificar su tamaño y tasa de crecimiento. De acuerdo con las estadísticas de importación de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales de Colombia (DIAN), existen 45 empresas registradas y según las últimas cifras de la entidad a mayo de 2023, en los primeros cinco meses del año se importaron a Colombia cerca de 2.105.574 cigarrillos electrónicos o dispositivos similares, lo que demuestra el rápido crecimiento del mercado.
No obstante hay que tener en cuenta que esta cifra puede ser mayor, dado a que existen empresas que están operando de manera irregular, por medio del contrabando y no cuentan con un registro legal. Razón por la cual es urgente una regulación inteligente para formalizar el mercado. Una regulación específica para la categoría permitiría al Estado contar con estadísticas actualizadas y poder formular política pública de una manera más asertiva.
Popularidad de los vapeadores en los jóvenes: un problema real
El mercado de los vapeadores ha crecido exponencialmente en los últimos años, sobre todo entre los jóvenes. Según la última encuesta del DANE en 2019, el 5% de la población entre 12 y 65 años ha consumido alguna vez en su vida cigarrillos electrónicos o vapeadores con nicotina.
Por lo anterior, Relx, en conjunto con el gremio AlterPro, están en pro de una regulación, pues contar con reglas de juego claras permitirá que estos productos no caigan en manos de los jóvenes o menores de edad.
“Relx cuenta con el Guardian Program, un programa global diseñado para educar y crear mecanismos para que los dispositivos de vapeo no caigan en manos de menores de edad. Es un programa muy robusto de capacitación a distribuidores mayoristas y minoristas basado en avanzadas técnologías de datos para evitar que estos productos sean consumidos por menores de edad. También, desde el etiquetado se advierte sobre el impacto que tienen éstos productos en la salud,” comenta Andrés Ucrós Maldonado, Director para España y Latinoamérica, Asuntos Externos, Relx International.
Conclusión
En Colombia, actualmente, el tabaco tradicional está sujeto a un impuesto. Buscar lo mismo para los vapeadores será una tarea compleja debido a la diversidad de productos que existe en el mercado. Sin embargo, expedir una regulación para la industria será un primer paso positivo para mitigar el creciente mercado negro e ilegal.
La regulación también garantizará una mejor información a los consumidores para ayudarles a distinguir entre los productos de calidad que cumplen con las normas internacionales y los productos que son falsificados y peligrosos. Asimismo, la regulación traerá medidas para que los vapeadores solo puedan ser consumidos por adultos, ayudando a mantener estos productos fuera del alcance de los menores de edad.
